Medio Ambiente, Energía y Trabajo



En 2004 ILSA se une al Programa Mundial de la Industria Química Responsible Care” promovido por Federchimica en Italia. ILSA se ha unido a este programa voluntario (cumplimiento de los principios rectores certificados por el organismo independiente Certiquality en 2014) que contempla la promoción del Desarrollo Sostenible de la industria química mundial, de acuerdo con valores y comportamientos orientados a la Seguridad, a la Salud y al Medio Ambiente, dentro del marco más general de la Responsabilidad Social Corporativa. El compromiso de reducir el impacto ambiental de los fertilizantes durante su ciclo de vida ha permitido a ILSA recibir en 2014 el “Premio Product Stewardship” otorgado por Responsible Care (Programa Voluntario de Desarrollo Sostenible de la Industria Química Mundial, gestionado en Italia por Federchimica) a empresas que se han distinguido en programas de mejora relacionados con aspectos ambientales, así como de salud y seguridad en el trabajo.










En 2011 ILSA se adhiere al Sistema di Gestión de la Seguridad en el Trabajo según las directrices de UNI INAILTrabajo seguro”.

ILSA es la primera, entre las empresas que operan en el sector de los fertilizantes orgánicos, que ha decidido realizar un estudio de su propia huella medioambiental como organización, OEF -Organization Environmental Footprint - y de sus productos PEF - Product Environmental Footprint - a lo largo de todo su ciclo de vida, hasta el consumidor final. Los resultados obtenidos, expresados a partir de las dieciséis (16) categorías de impacto esperado (cambio climático, agotamiento de la capa de ozono, toxicidad, eutrofización del agua, ecotoxicidad equivalente, uso del suelo, etc.) son ciertamente alentadores, destacando para muchas de las categorías, impactos menores de hasta un 50 %, con las mismas unidades nutricionales aplicadas al suelo, utilizando como referencia estudios de otros productos sintéticos históricamente presentes en el mercado.

En base a estos resultados, ILSA cuenta con una herramienta robusta para entender su desempeño ambiental, los puntos de posible mejora y reducción de su impacto, así como para fortalecer su “green reputation”. Con el estudio PEF/OEF - Product Environmental Footprint/Organization Environmental Footprint, lanzado en 2014 y concluido en 2015, ILSA, la primera empresa europea del sector, se ha adherido a la recomendación de la Comunidad Europea número 2013/179/UE calculando el impacto ambiental generado durante todo el ciclo de vida de sus matrices exclusivas AGROGEL® y GELAMIN®, creando una herramienta que permitirá mejorar aún más el comportamiento ambiental, actuando sobre las diferentes clases de impacto.